Síntesis Simposio 3 "Desigualdades de género en el empleo"

Los roles de género socialmente asignados, que incluyen la desigualdad en la división sexual de trabajo reproductivo y doméstico, impactan de manera directa en las brechas entre mujeres y varones en el mundo del trabajo. Si bien en las últimas décadas las mujeres incrementaron su participación en el mercado laboral, aún no lograron igualar la tasa de participación de los varones, soportando una mayor carga del desempleo, subempleo y, en general, condiciones de empleo consideradas desfavorables. Al mismo tiempo, las problemáticas más relevantes aún persisten. La brecha salarial guarda estrecha relación con fenómenos conocidos como techo y paredes de cristal, suelo pegajoso, como también con las diferencias de carga de trabajo remunerado y no remunerado, que pueden ser provocadas por prácticas discriminatorias y de socialización diferencial de género. Las crecientes exigencias de disponibilidad por parte de las empresas, junto con las prácticas de gestión de la fuerza de trabajo dificultan gravemente las, ya de por sí, exiguas posibilidades de conciliación de la vida laboral, familiar y personal, con determinadas prácticas consideradas neutrales, como el aumento del teletrabajo, perpetuando roles y estereotipos tradicionales.